¿Crees que se puede crear masa muscular de buena calidad consumiendo proteínas de insecto? La respuesta es sí.
Te contamos aquí por qué.
En general todos los estudios científicos validan el hecho de que el consumo de proteínas asociado al ejercicio pueden aumentar y mejorar la masa muscular en el ser humano. Sin embargo, la mayoría de los estudios hablan de las clásicas fuentes proteicas: huevo, carne, pollo, legumbres, leche.
Recientemente, el consumo de insectos como fuente de proteínas ha ido apareciendo en la cultura occidental como una fuente potente y de alta calidad (en oriente es parte de la cultura)
En este sentido, con el paso del tiempo, han ido apareciendo muchos estudios sobre el impacto en el desarrollo muscular de la harina de insectos, la cual es básicamente el insecto criado en condiciones especiales para poder utilizarlo como alimento y procesado (molido y deshidratado) para poder ser consumido sin problemas.
En general se suele hablar de 2 insectos:
El grillo (Achetta domesticus) y el gusano de harina (Tenebrio molitor). Ambos han aparecido como fuentes proteicas de alta calidad para el consumo humano, demostrando su beneficio frente a los lácteos y consumo de proteína animal principalmente, considerando que son fuentes mucho más sustentables y con un impacto mucho menor para el planeta:
-Los insectos son en su mayoría proteínas: entre el 75 y el 90% del grillo, por ejemplo, es pura proteína
-Se requiere mucho menos espacio físico para generar la misma cantidad de proteína (muchas hectáreas en caso de bovinos vs. menos de 1/2 hectárea para una granja de grillos)
-Se necesita mucho menos agua para generar la misma cantidad de gramos de proteína
-Generan muchísimo menos desechos que contribuyen al calentamiento global, en comparación con las heces de los animales
-Se requiere muchos menos recursos para generar la proteína: menos electricidad, menos combustible, etc.
-Los costos de producción en general son muchísimo más bajos en comparación con la producción de proteína animal clásica
La literatura científica reciente ha evidenciado el mismo (e incluso en algunos casos mejor) nivel de proteína alcanzado en la sangre luego de su consumo, demostrando su excelente biodisponibilidad oral.
Se ha demostrado mediante biopsias musculares que la calidad muscular con el consumo de proteínas de insecto es similar que el generado con alimentación omnívora clásica, e incluso algunos lo proponen como el futuro de la alimentación proteica para el desarrollo muscular y el cambio de composición corporal a base de pérdida de masa grasa.
Sin embargo, si bien sus beneficios están cada vez más demostrado, existen limitaciones culturales en occidente que podrían jugar en contra de su utilización en el corto plazo como fuente proteica en la población.
Y tú, ¿consumirías insectos para mejorar tu masa muscular? ¿Tomarías un batido o comerías una barrita de proteína de harina de grillo?
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BRUNO
MÉDICO EQUIPO VILBOFIT
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